Tipologías cutáneas

Hoy queremos contaros algunos detalles sobre los distintos tipos de piel.

La piel es el órgano más grande de nuestro organismo, precisamente porque recorre todo nuestro cuerpo, además entre otras funciones actúa como barrera protectora y también influye en nuestra apariencia externa. Conocer adecuadamente nuestra piel es el primer paso para entender qué necesita y cómo cuidarla.

Existen cinco tipos principales de piel:

1. Piel Seca:

- Es la más fina y la más propensa a las arrugas y las manchas. De aspecto delgado y frágil.

- Su ventaja es que sus poros son muy cerrados, pero requiere una hidratación constante e intensa en cada temporada.

- Se agrieta más que las demás y puede llegar a ser tirante si no se cuida suficiente.

- Hay que evitar la exfoliación demasiado a menudo, podría resecarla más.

- De aspecto delgado y frágil, es visiblemente poco elástica, deshidratada y escamada.

- Todos los tipos de piel se secan más a medida que envejecen.

- Los productos más adecuados para la piel seca son delicados y emolientes para evitar la sensación de la piel "tirante" y ricos en factores hidratantes naturales.

Algunos ejemplos de los productos LabDERMIS para piel seca:

2. Piel Grasa:

- Es una piel con poros marcados e imperfecciones. A menudo con granitos o puntos negros.

- Se debe a la producción excesiva de sebo que propicia este desagradable aspecto brillante en la zona T (frente, mentón y nariz).

- Es necesario exfoliarla a menudo.

- Se caracteriza por la típica apariencia brillante, folículos dilatados y es aceitosa al tacto.

- Los productos para el cuidado de la piel grasa están basados en fórmulas astringentes, sebo-regularodaras y purificantes.

Algunos ejemplos de los productos LabDERMIS para piel grasa:

3. Piel Mixta:

- Suma los problemas de los dos tipos anteriores: la zona T (frente, mentón y nariz) tienden ser más grasa mientras que la zona de las mejillas suele estar seca.

- Se define por ser una piel no uniforme, que presenta zonas muy áridas y secas alternadas con impurezas y grasa.

Algunos ejemplos de los productos LabDERMIS para piel mixta:

4. Piel Sensible o reactiva:

- Reacciona de forma muy extrema a algunos cambios climáticos y productos. Se irrita muy fácilmente, provocando hasta picores y alergias.

- La identificación y evaluación de síntomas como eritema, erupción, pinchazos, picor y escozor ayuda a determinar el estado de la piel.

- Cuidar este tipo de piel supone renunciar a todos los productos potencialmente peligrosos o con componentes químicos, y optar más bien por soluciones naturales.

En LabDERMIS tenemos una muy amplia gama de productos para piel sensible:

5. Piel Normal 

- El término científico para piel con buen equilibrio es el de "eudérmica".

- Presenta poros finos, buena circulación sanguínea, textura suave y lisa.

- Transparencia uniforme de color rosado, fresco.

- Los cuidados: hidratación con activos humectantes y emolientes.

¿Sabes qué tipo de piel tienes?

¿Y qué pasa si tu piel es una mezcla de varios tipos?

Si no te conformas con la distinción básica entre piel seca, grasa o mixta, no te preocupes. Es normal.

Porque cada persona es diferente y no todas las pieles son iguales.

Cuéntanos qué problemas dermatológicos tienes e intentaremos ayudarte en tu rutina de cuidados diarios.

NO HAY PIEL FEA.

HAY PIEL MAL CUIDADA.

Si tienes dudas, estamos aquí para aconsejarte los cuidados más adecuados para tu piel.

Tlf. 680564422

info@labdermis.com

O accede a este formulario para hacer la consulta:

Pregunta a un Experto de LabDERMIS

Bibligrafía: Máster de Cosmética y Dermofarmacia "Tipologías cutanéas". Webinar 1. MEDAC

Comments (0)

No comments at this moment
Producto agregado a la lista de deseos